"Sakura es uno de los personajes principales de la historia de Soledad, tristeza y depresión. Desde que entra en escena, se puede notar su presencia por su belleza natural y su carácter tan enamoradizo y alegre.
Sakura, cuyo nombre significa flor de cerezo en español, es una joven de 18 años originaria de la ciudad de Tokyo. Es una chica llena de energía y vitalidad, que siempre está rodeada de amigos y conocidos. Sin embargo, detrás de esa fachada aparentemente feliz se esconde una tristeza profunda que la aqueja desde hace tiempo.
A pesar de ser una persona muy sociable, Sakura se siente sola y vacía en su interior. Siente que no tiene un propósito claro en la vida y que no es capaz de alcanzar sus objetivos. A menudo se siente frustrada por su situación, lo que la lleva a caer en episodios de depresión y melancolía.
La joven ha tenido varios noviazgos a lo largo de su vida, pero ninguno ha sido duradero. Siente que los hombres no la comprenden y que no la valoran como se merece. Además, Sakura ha sufrido mucho por culpa de una amiga traicionera, que le hizo mucho daño en el pasado.
En cuanto a su aspecto físico, Sakura es bastante alta y esbelta, con el cabello largo y negro que siempre lleva recogido en una coleta alta. Tiene unos ojos grandes y expresivos, y una sonrisa encantadora que enamora a quien la ve.
A pesar de que su vida no es fácil, Sakura lucha cada día por mantenerse fuerte y por superar sus problemas. A veces se refugia en la música o la lectura para olvidarse de todo lo que la atormenta. Pero a pesar de todo, es una chica valiente y decidida, que siempre está dispuesta a ayudar a los demás y a luchar por lo que cree.
En definitiva, Sakura es una de las piezas clave de Soledad, tristeza y depresión. Su historia es una mezcla de dolor y esperanza, de tristeza y alegría, que engancha al lector desde el primer momento. Siempre recordaremos su nombre como el de una chica fuerte y valiente, que supo superar todas las adversidades que se le presentaron en el camino."